Un súper tema para la reflexión del próximo día del Amor, donde Cupido desatará las pasiones y las infidelidades estarán a flor de piel (lastima que este año va a caer en domingo jajajaj) la autora de esta aguda e inteligente disección del amor, es una de las explicaciones más probables para un fenómeno que se ha observado en las culturas más dispares y en diversos períodos de la historia.
Pero no es solamente hacia el adulterio adonde Helen E. Fisher apunta las armas de su aparato crítico. Con esta obra hace un vasto estudio comparativo sobre el apareamiento tal como se practica en diferentes especies animales.
La mirada copulatoria
La mirada es posiblemente la más asombrosa técnica humana de cortejo: el lenguaje de los ojos. En las culturas occidentales, donde el contacto visual entre los sexos está permitido, hombres y mujeres a menudo miran fijamente a una pareja potencial por dos o tres segundos durante los cuales sus pupilas pueden dilatarse: una señal de extremo interés. Luego el o la que mira baja los párpados y aparta la vista.
Chupirul Coqueto: El besito Mexicano.
Para el Día de San Valentín decidí preparar un Coctel Besito Mexicano con licor de chocolate oscuro Godiva Dark Chocolate Liqueur, tequila, leche evaporada y cerezas marrasquino. En los restaurantes FiFi’s en México, comúnmente se servía al final de la comida un coctel llamado Besito de Café( pregúnteles a sus abuelitos) Tomando este coctel como inspiración salió el coctel dulzón y aterciopelado con licor de chocolate oscuro Godiva Dark Chocolate Liqueur( se compra en la Europea)
INGREDIENTES
* 3 onzas de licor de chocolate oscuro Godiva Dark Chocolate Liqueur 1.5 onzas por vaso
* 1 onza de tequila blanco 0.5 ( use onzas por vaso
* 1 taza de leche evaporada
* 6 cerezas marrasquino( son las de almíbar rojas)
* 2 palitos de bambú pa la decorada
ELABORACIÓN
* En un vaso añade 1.5 onzas de licor de chocolate oscuro Godiva® Dark Chocolate Liqueur, después agrega 0.5 onzas de tequila blanco y combina.
* Poco a poco agrega la leche evaporada, aproximadamente 4 onzas dependiendo de tu gusto.
* Decora con tres cerezas marrasquino por vaso.
Análisis del libro: Anatomía del amor Historia natural de la monogamía, el adulterio y el divorcio de Helen Fisher.
La trama gira en torno a la relación comenzó una noche cuando una babuina joven, Thalia, giró sobre sí misma y descubrió a un joven macho alfa, Alex, mirándola fijamente. Estaban a unos cinco metros de distancia uno de otro. De inmediato, él apartó la mirada. Entonces ella lo miró a él, hasta que Alex volvió a mirarla. En ese momento ella comenzó a mover los dedos de los pies con extrema concentración. Y así continuaron. Cada vez que ella lo miraba, él apartaba los ojos; cada vez que él la miraba, ella se ocupaba de sus pies. Hasta que al fin Alex la pescó mirándolo: la "mirada de respuesta".
Tal vez sean los ojos -y no el corazón, los genitales o el cerebro- los órganos donde se inicia el idilio, ya que es la mirada penetrante la que con frecuencia provoca la sonrisa humana.
"Hay una sonrisa de amor / y una sonrisa mentirosa", escribió el poeta William Blake. En realidad, los seres humanos tienen un repertorio de por lo menos dieciocho tipos de sonrisas diferentes, de las cuales sólo usamos algunas durante el flirteo, y va cayendo el libro en teorías científicas y datos sobre las relaciones humanas.
El amor perfecto
Tal vez no sepamos nunca quién es más infiel. Lo que sí sabemos es por qué hombres y mujeres dicen ser adúlteros.
Cuando las encuestas preguntan a hombres y mujeres por qué tienen aventuras extramaritales, los adúlteros siempre responde: "por placer", "por amor", o "no lo sé". Los psicólogos agregarían que algunos adúlteros quieren ser descubiertos para poder hacer las paces con sus cónyuges. Otros usan las aventuras para mejorar sus vínculos conyugales, satisfaciendo ciertas necesidades fuera de casa. Y están también aquellos a los que los deslices les sirven de excusa para abandonar al cónyuge. Algunas personas buscan llamar la atención.
Otras necesitan más autonomía o más independencia. Hay quienes buscan sentirse especiales, deseados, más masculinos o más femeninas, más atractivos o mejor comprendidos. El objetivo puede ser una mejor comunicación, una mayor intimidad o simplemente una vida sexual más intensa. Otros ansían la fantasía, la excitación o el peligro. Unos pocos lo hacen para vengarse. Algunos otros buscan el amor "perfecto". Y hay quienes buscan demostrarse a sí mismos que todavía son jóvenes, buscan la aventura que representa la última oportunidad.
Hay muchos otros factores sociológicos y psicológicos que se relacionan con el adulterio además de los anteriores. El trabajo de horario completo en el caso de las mujeres, el nivel de educación, la sociedad en donde nacen, la frecuencia con la que se ven con sus amigas y claro el grado de independencia económica, la experiencia sexual previa al matrimonio que tienen, el código de valores y hasta la ocupación de los padres, alguna enfermedad crónica del cónyuge, la frigidez o los viajes constantes de su pareja , todo puede llevar a las mujeres a una clara tendencia al adulterio ( Bueno hasta ir al Oxxo, jajajaja)
Pero, como supuesta darwinista, la autora prefiero la simple explicación del hombre que dice buscar la variedad y la mujer, que cuenta con una lista casi interminable dé factores pero hay unos que neta si son sorprendentes y hasta simpáticos y a mi entender bastante lógicos: "Un hombre te dará sólo un tipo de comida, pero si tienes amantes, uno traerá una cosa y el otro te traerá otra. Uno llegará de noche con carne, otro con dinero, otro con cuentas de colores". Estas respuestas tienen veracidad evolutiva. Porque si bien la mujer que se acuesta con un hombre no está pensando en su futuro genético cuando se mete entre las sábanas, y un embarazo es lo último que quiere si está pensando en satisfacer alguna carencia.
No así cuando el marido que seduce a una compañera de trabajo o a cualquier mujer después del brindis de Navidad o bajo cualquier circunstancia ya que fue atraído por la fémina de la especie y esta misma es la que le da entrada a la copula, se confirma lo que por milenios a ocurrido.
El amante se convierte en proveedor y los beneficios mutuos proporcionados por dicha práctica, es lo que explica la tendencia mundial al adulterio.
Los hombres entregan amor esperando sexo y las mujeres entregan sexo, esperando amor.
Fabuloso tratado sobre el complejo fenómeno amoroso. La autora va exponiendo sus ideas con un ritmo fluido y una documentación teórica y científica impecable. Es un libro perfecto en su génesis y en su concepción tanto como en su desarrollo. Imprescindible, muy certero en desenmarañar que la liberación sensual femenina, fue el origen de su contrario el feminismo recalcitrante, donde los odios hacia el género masculino, satanizan el adulterio masculino y promueven y aplauden el adulterio femenino.
Desde mi punto de vista, los seres humanos poseen una naturaleza común, un juego de receptores químico/ biológicos con potencialidades inconscientes compartidas que están codificadas en nuestro ADN al evolucionar nos dieron respuestas afectivas al amor muy similar al efecto de comer chocolates, nos fueron útiles, por milenios, sin embargo la evolución del cerebro y muy importante la sociedad y las condiciones en donde nos desenvolvemos, nos podrán hoy en día con un sin número de posibles parejas en contacto, por lo que las posibilidades de una relación son exponenciales, no así la propia fidelidad entre las parejas supuestamente estables ( y bajo el constante ataque de posibles infidelidades) pero mientras se enteran de cómo es su pareja en realidad, sírvanse el Chupirul coqueto bien chocolatoso, para acelerar el libido y festejar el día del amorrssss.
Acuérdense de bañarse con Rosa Venus.
Hasta la próxima!!!
Gabriel Cervantes Laguna
Pero no es solamente hacia el adulterio adonde Helen E. Fisher apunta las armas de su aparato crítico. Con esta obra hace un vasto estudio comparativo sobre el apareamiento tal como se practica en diferentes especies animales.
La mirada copulatoria
La mirada es posiblemente la más asombrosa técnica humana de cortejo: el lenguaje de los ojos. En las culturas occidentales, donde el contacto visual entre los sexos está permitido, hombres y mujeres a menudo miran fijamente a una pareja potencial por dos o tres segundos durante los cuales sus pupilas pueden dilatarse: una señal de extremo interés. Luego el o la que mira baja los párpados y aparta la vista.
Chupirul Coqueto: El besito Mexicano.
Para el Día de San Valentín decidí preparar un Coctel Besito Mexicano con licor de chocolate oscuro Godiva Dark Chocolate Liqueur, tequila, leche evaporada y cerezas marrasquino. En los restaurantes FiFi’s en México, comúnmente se servía al final de la comida un coctel llamado Besito de Café( pregúnteles a sus abuelitos) Tomando este coctel como inspiración salió el coctel dulzón y aterciopelado con licor de chocolate oscuro Godiva Dark Chocolate Liqueur( se compra en la Europea)
INGREDIENTES
* 3 onzas de licor de chocolate oscuro Godiva Dark Chocolate Liqueur 1.5 onzas por vaso
* 1 onza de tequila blanco 0.5 ( use onzas por vaso
* 1 taza de leche evaporada
* 6 cerezas marrasquino( son las de almíbar rojas)
* 2 palitos de bambú pa la decorada
ELABORACIÓN
* En un vaso añade 1.5 onzas de licor de chocolate oscuro Godiva® Dark Chocolate Liqueur, después agrega 0.5 onzas de tequila blanco y combina.
* Poco a poco agrega la leche evaporada, aproximadamente 4 onzas dependiendo de tu gusto.
* Decora con tres cerezas marrasquino por vaso.
Análisis del libro: Anatomía del amor Historia natural de la monogamía, el adulterio y el divorcio de Helen Fisher.
La trama gira en torno a la relación comenzó una noche cuando una babuina joven, Thalia, giró sobre sí misma y descubrió a un joven macho alfa, Alex, mirándola fijamente. Estaban a unos cinco metros de distancia uno de otro. De inmediato, él apartó la mirada. Entonces ella lo miró a él, hasta que Alex volvió a mirarla. En ese momento ella comenzó a mover los dedos de los pies con extrema concentración. Y así continuaron. Cada vez que ella lo miraba, él apartaba los ojos; cada vez que él la miraba, ella se ocupaba de sus pies. Hasta que al fin Alex la pescó mirándolo: la "mirada de respuesta".
Tal vez sean los ojos -y no el corazón, los genitales o el cerebro- los órganos donde se inicia el idilio, ya que es la mirada penetrante la que con frecuencia provoca la sonrisa humana.
"Hay una sonrisa de amor / y una sonrisa mentirosa", escribió el poeta William Blake. En realidad, los seres humanos tienen un repertorio de por lo menos dieciocho tipos de sonrisas diferentes, de las cuales sólo usamos algunas durante el flirteo, y va cayendo el libro en teorías científicas y datos sobre las relaciones humanas.
El amor perfecto
Tal vez no sepamos nunca quién es más infiel. Lo que sí sabemos es por qué hombres y mujeres dicen ser adúlteros.
Cuando las encuestas preguntan a hombres y mujeres por qué tienen aventuras extramaritales, los adúlteros siempre responde: "por placer", "por amor", o "no lo sé". Los psicólogos agregarían que algunos adúlteros quieren ser descubiertos para poder hacer las paces con sus cónyuges. Otros usan las aventuras para mejorar sus vínculos conyugales, satisfaciendo ciertas necesidades fuera de casa. Y están también aquellos a los que los deslices les sirven de excusa para abandonar al cónyuge. Algunas personas buscan llamar la atención.
Otras necesitan más autonomía o más independencia. Hay quienes buscan sentirse especiales, deseados, más masculinos o más femeninas, más atractivos o mejor comprendidos. El objetivo puede ser una mejor comunicación, una mayor intimidad o simplemente una vida sexual más intensa. Otros ansían la fantasía, la excitación o el peligro. Unos pocos lo hacen para vengarse. Algunos otros buscan el amor "perfecto". Y hay quienes buscan demostrarse a sí mismos que todavía son jóvenes, buscan la aventura que representa la última oportunidad.
Hay muchos otros factores sociológicos y psicológicos que se relacionan con el adulterio además de los anteriores. El trabajo de horario completo en el caso de las mujeres, el nivel de educación, la sociedad en donde nacen, la frecuencia con la que se ven con sus amigas y claro el grado de independencia económica, la experiencia sexual previa al matrimonio que tienen, el código de valores y hasta la ocupación de los padres, alguna enfermedad crónica del cónyuge, la frigidez o los viajes constantes de su pareja , todo puede llevar a las mujeres a una clara tendencia al adulterio ( Bueno hasta ir al Oxxo, jajajaja)
Pero, como supuesta darwinista, la autora prefiero la simple explicación del hombre que dice buscar la variedad y la mujer, que cuenta con una lista casi interminable dé factores pero hay unos que neta si son sorprendentes y hasta simpáticos y a mi entender bastante lógicos: "Un hombre te dará sólo un tipo de comida, pero si tienes amantes, uno traerá una cosa y el otro te traerá otra. Uno llegará de noche con carne, otro con dinero, otro con cuentas de colores". Estas respuestas tienen veracidad evolutiva. Porque si bien la mujer que se acuesta con un hombre no está pensando en su futuro genético cuando se mete entre las sábanas, y un embarazo es lo último que quiere si está pensando en satisfacer alguna carencia.
No así cuando el marido que seduce a una compañera de trabajo o a cualquier mujer después del brindis de Navidad o bajo cualquier circunstancia ya que fue atraído por la fémina de la especie y esta misma es la que le da entrada a la copula, se confirma lo que por milenios a ocurrido.
El amante se convierte en proveedor y los beneficios mutuos proporcionados por dicha práctica, es lo que explica la tendencia mundial al adulterio.
Los hombres entregan amor esperando sexo y las mujeres entregan sexo, esperando amor.
Fabuloso tratado sobre el complejo fenómeno amoroso. La autora va exponiendo sus ideas con un ritmo fluido y una documentación teórica y científica impecable. Es un libro perfecto en su génesis y en su concepción tanto como en su desarrollo. Imprescindible, muy certero en desenmarañar que la liberación sensual femenina, fue el origen de su contrario el feminismo recalcitrante, donde los odios hacia el género masculino, satanizan el adulterio masculino y promueven y aplauden el adulterio femenino.
Desde mi punto de vista, los seres humanos poseen una naturaleza común, un juego de receptores químico/ biológicos con potencialidades inconscientes compartidas que están codificadas en nuestro ADN al evolucionar nos dieron respuestas afectivas al amor muy similar al efecto de comer chocolates, nos fueron útiles, por milenios, sin embargo la evolución del cerebro y muy importante la sociedad y las condiciones en donde nos desenvolvemos, nos podrán hoy en día con un sin número de posibles parejas en contacto, por lo que las posibilidades de una relación son exponenciales, no así la propia fidelidad entre las parejas supuestamente estables ( y bajo el constante ataque de posibles infidelidades) pero mientras se enteran de cómo es su pareja en realidad, sírvanse el Chupirul coqueto bien chocolatoso, para acelerar el libido y festejar el día del amorrssss.
Acuérdense de bañarse con Rosa Venus.
Hasta la próxima!!!
Gabriel Cervantes Laguna